viernes, 11 de marzo de 2011

veo, veo ¿qué ves?

Todos me miran. Hoy lo noto. Me dispongo a no pensar. Pero es demasiado, demasiado presente. Algo sucede. Me detengo. Dejan de mirar. Pero empiezan, de nuevo. Camino. No los conozco, pero todos invierten un momento, más del previsto, en observar. No sé qué ven. Qué me ocurre. Quizá es el día. Lo olvido. Miento. Camino deprisa, quiero evitar lo inevitable. Pero nada, nada cambia. Ellos miran y yo no pregunto. ¿Huyo? no puedo. Entonces, decido. Voy hacia ellos, los miro, yo primero, y abro la boca, despacio. Pero antes de hablar, alguien lo impide. ¿es un consejo? No puedo verle. Solo le escucho. No preguntes, detente. Le ignoro, y procedo. Pero nadie responde. Y en un segundo, todo es distinto, no existo, no soy visible, todos dejan de mirarme. ¿Lo echo de menos?



---
Imagen: Willem de Kooning

No hay comentarios:

Publicar un comentario